La dolorosa historia del joven que asesinó a su padre por deudas  

En la cárcel con medida de aseguramiento permanece un joven de 23 años señalado de quitarle la vida a su padre propinándole más de 30 heridas de arma blanca y, para no ser descubierto, escondió el cuerpo en la casa varios días para luego arrojarlo a una quebrada.
Las autoridades detectaron múltiples heridas de arma blanca al parecer cuchillo en el cuello, rostro, abdomen y otras partes del cuerpo del padre de familia.
Los dolorosos hechos sucedieron a mediados de julio de este año en una casa del barrio Timanco, en la ciudad de Neiva, Huila, donde días después Wilson Javier Peña Tamayo, presunto autor del homicidio, se entregó voluntariamente a las autoridades a las que les confesó lo sucedido.
La víctima de este caso es Salvador Peña quien, según las autoridades, sostuvo una discusión con su hijo Wilson Javier por temas económicos pues manejaban negocios y préstamos de manera conjunta lo que generaba altercados.
Tras el crimen, Wilson Javier tomó el cuerpo de su padre y con ayuda de dos cómplices él mismo lo trasladó en carro particular a una zona rural de Neiva donde lo arrojaron a una quebrada con la intención de no dejar huellas de su muerte.
El cuerpo, en avanzado estado de descomposición, fue encontrado por un campesino que fue alertado por las  aves de carroña que merodeaban el lugar.
Salvador Peña había nacido hace 50 años en el municipio de Pitalito, Huila, y residía en el barrio Timanco, de Neiva, donde fue asesinado. Se trata de un suboficial pensionado del Ejército que tenía negocios de tipo comercial con su hijo.